Las peleas no solucionan nada, al contrario, solo lo empeoran. Esto es algo que la mayoría de los padres nos enseñan desde muy pequeños y, llegados a la edad adulta, lo tenemos más que asumido.
En el mundo animal este tipo de disputas se suelen dar por motivos territoriales o para conseguir a las mejores hembras. Pero los animales no son tontos y recurren a la violencia física solo en caso de que sea inevitable, ya que antes intentan “intimidar” a sus oponentes con otros métodos.
Hoy os traemos un vídeo de dos gallos que deben haber agotado todas las vías de intimidación y se han visto obligados a recurrir a la violencia física. Pero esto de las peleas de gallos no le gusta ni un pelo a su compañero de corral, un joven cachorro que ha decidido evitar la pelea entre estas dos aves de una forma bastante cómica.
Realmente estas acciones dejan claro que los animales son, en muchas ocasiones, más humanos que los propios humanos.